Hoy, como es domingo y toca descansar, os presento un plato especial muy rapidito de hacer. Y os explico lo de "rapidito de hacer". Hace unos días mi madre me regaló unas patas de pulpo ya cocidas, excusa ideal para preparar un plato con ellas. Aunque ya ha pasado la temporada de verano en la que son frecuentes los picadillos, no deben olvidarse porque son un acompañamiento muy nutritivo para cualquier plato. En este caso con un picadillo de pimientos verdes, cebolla, tomate y perejil, preparé un estupendo salpicón de pulpo que rematé con unas gambas al ajillo aún templadas. Finalmente aliñamos con aceite de oliva, sal y vinagre de manzana.
Mi pequeño truquillo: este salpicón llevaba tan solo una cucharadita de aceite de oliva puesto que aproveché el aceite sobrante de las gambas al ajillo para agregarlo al aliño. Suele darle un toque espectacular tanto a los salpicones como a las ensaladas.
Mi pequeño truquillo: este salpicón llevaba tan solo una cucharadita de aceite de oliva puesto que aproveché el aceite sobrante de las gambas al ajillo para agregarlo al aliño. Suele darle un toque espectacular tanto a los salpicones como a las ensaladas.
El resultado fue exquisito. Espero que os guste y que pronto podáis degustarlo en vuestras casas. Feliz domingo:
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